La importancia de quererse a uno mismo

“El caballero lloró más al darse cuenta de que si no se amaba, no podía amar realmente a otros. Su necesidad de ellos se interpondría. En eso que apareció el mago y le dijo: solo podrás amar a otros en la medida en que te ames a ti mismo”. El caballero de la armadura oxidada.

Tras la partida de nuestro hermano o hermana, además del profundo dolor que sentimos, es común sentir desinterés por las actividades del día a día. Algo tan sencillo cómo arreglarse de pronto deja de tener tanto interés en nuestro día así como también suele dejar de estar en nuestra mente el hacer planes. Desde el momento de la partida parece que ya nada tiene sentido y la tristeza y el vacío nubla nuestro día a día llevándonos a un descuido de nuestro propio bienestar.

El amor propio es esencial para ir más allá del sufrimiento ya que brinda la fortaleza y la resiliencia necesaria para navegar a través del dolor y la tristeza que acompaña al momento. Este amor implica tener la humildad y tolerancia de darnos permiso para equivocarnos y cometer errores. El amor propio nos ayuda a recordar que no hay que cargar con culpas innecesarias. Nos recuerda lo importante que es cuidar de nosotros mismos. Buscamos terapia si así lo necesitamos, nos permitimos descansar y poner en orden la cabeza sí creemos que es lo que necesitamos, buscamos formas de expresar el dolor ya sea escuchando música, pintando, escribiendo.

El amor propio no quita dolor a la partida del hermano pero nos recuerda que tenemos que cuidarnos a nosotros mismos para continuar.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *